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Enciclopedia de ostomía. Urostomía

  • La porción anatómica que se aboca a la piel del abdomen es el conducto urinario.

    La derivación del flujo urinario hacia el exterior a través de un orificio artificial es necesaria cuando existe una alteración de la anatomía urinaria, eliminando el paso de la orina por la vejiga cuando ésta debe ser extirpada por alguna lesión.

    La causa suele ser un tumor.

    Su objetivo es preservar la función del riñón.

    Se pierde el control voluntario, por lo que la salida de orina será gota a gota de forma continua.

    Se suelen abocar los uréteres o se desvían hacia un tramo de intestino delgado, que se utiliza para formar el estoma.

    dibujo de un torso en el que se ve el sistema urinario y el punto de la urostomía

Dispositivos

  • Como urostomizado, lo esperable es que uses habitualmente:

    Dispositivos de dos piezas con bolsa de urostomía

    Son aquéllos en los que placa y bolsa están separados, son dos piezas independientes que se unen mediante un enganche mecánico.

    Permiten mantener el disco pegado a la piel entre dos y tres días.

    La bolsa es de grifo.

    El disco permanecerá adherido a la piel entre dos y tres días, siempre y cuando no se produzcan fugas, y se mantenga adherido a la piel

    La bolsa se cambiará diariamente o siempre que sea necesario

    No se aconseja cambiarla más, porque la tracción de despegarla tracciona también del disco, reduciendo su adhesión a la piel.

    Te facilitarán su colocación en caso de falta de habilidad manual o pérdida de agudeza visual.

    foto de dos Dispositivos urostomía de dos piezas
  • La bolsa de urostomía se caracteriza porque:

    • El enganche es mecánico pues permite girar su orientación, facilitando su vaciado durante las horas de sueño por gravedad.
    • El vaciado se realiza a través de un grifo que facilita su salida y permite conectar otras bolsas de mayor capacidad.
    • Posee diferentes válvulas y está compartimentada en su interior, impidiendo el reflujo de la orina.
    • Es aconsejable vaciarla frecuentemente para que el peso del contenido no traicione del disco, favoreciendo que se despegue.

Cambio de bolsa

  •  

    Integra nuevas rutinas

    Ya hemos visto cómo la sensibilidad de tu piel puede determinar el tipo de dispositivo: una o dos piezas.

    Ahora veremos qué actividades serán necesarias para sacar el máximo rendimiento de tu dispositivo, con la integridad de tu piel como principal objetivo.

    Minimizar el riesgo de fugas contribuye a una mejor calidad de vida, y serán los cuidados que prestes a tu estoma lo que te ayudarán a conseguirlo.

    Como urostomizado, la salida de orina será continua, por lo que deberás controlar el volumen acumulado en tu bolsa.

  • Permite observar el aspecto del estoma y el estado del disco, comprobando que no haya orina por debajo del mismo, aunque no llegue a producir que se haya despegado completamente. Puede cambiarse tantas veces como sea necesario, pues el disco permanece pegado protegiendo la piel circundante.

    Promueve la sensación de limpieza y comodidad pues aunque se vacíe con cuidado, puede que la bolsa se manche tras varios vaciados. Al principio será útil contar con un espejo, aunque a medida que se domine mejor la técnica serás capaz de hacerlo sin espejo.

    Recuerda: el primer y último paso debe ser el lavado de manos.

  • Serán necesarios una esponja y jabón neutro  (o una toallita limpiadora no cosmética ni alcohólica), una toalla y una bolsa para desechar la bolsa sucia.

    Asegúrate de cerrar el grifo de la nueva bolsa antes de iniciar el cambio. Vacía el contenido de la bolsa antes de empezar, para no mancharte innecesariamente.

    En el hospital las enfermeras utilizan gasas y suero porque es su material de trabajo más habitual, pero recuerda que no se trata de una herida y que por tanto no es necesario ningún material especial.

  • Abre el clip de cierre y retira la bolsa de arriba hacia abajo, sujetando con la mano el disco para facilitar su salida.

    Limpia el estoma con agua y jabón suavemente para no arañar la mucosa, a continuación limpia la porción de disco que está en contacto con la orina, retirando los restos de moco que existan.

    Seca a toques para evitar irritar la mucosa.

    Asegúrate de que el clip de seguridad está abierto antes de engancharlo. Engancha la bolsa al aro desde abajo hacia arriba.

    Vete siguiendo el contorno del aro y presionando suavemente hasta que percibas el click. Cierra el clip de seguridad una vez que la bolsa esté perfectamente engarzada en el aro

    Recuerda: el primer y último paso debe ser el lavado de manos.

Vaciado de bolsa

  • Siendo portador de una urostomía ésta es la actividad que más vas a repetir.

    Resultará algo cotidiano, como acudir al baño a orinar, salvo que no se siente un aviso previo, sino que debe ser algo incorporado a las actividades cotidianas.

    Procura vaciarla antes de que llegue a la mitad de su capacidad.

    Cuanto más llena, mayor peso que tracciona del disco, favoreciendo que se despegue.

  • El vaciado frecuente de la bolsa colabora a un mayor confort y bienestar.

    Favorece la integridad de la piel de alrededor del estoma, evitando la aparición de complicaciones.

    La necesidad de vaciado no debe constituir un impedimento para salir a la calle o  cumplir con las actividades diarias.

    Existen muy pocos baños adaptados para ostimizados pero es una actividad que puede realizarse sin inconvenientes en cualquier aseo público.

    Una buena postura puede ser sentados a horcajadas en el inodoro pero mirando hacia la cisterna.

    Una vez abierta la bolsa, vaciaremos el contenido en el inodoro.

    Con ayuda del papel limpiaremos los bordes de la bolsa y volveremos a cerrarla.

    Recuerda: lavado de manos antes y después del vaciado de la bolsa.

  • Recorte de disco

    Si el disco no es precortado, debes recortarlo antes de empezar. El estoma va disminuyendo de tamaño durante los primeros meses tras la cirugía, por lo que es importante que utilices la regla para medirlo con frecuencia e ir adaptando el tamaño del disco, así como su forma al recortarlo. El momento del cambio es el apropiado para realizar esta medición.

    El disco debe ajustarse al estoma como “anillo al dedo”, es decir rodearlo completamente sin dejar expuesta nada de piel del abdomen, pero sin ahorcarlo ni clavarse en la mucosa. Si tu estoma es redondo, puedes guiarte con las marcas concéntricas del adhesivo protector. Si es ovalado, tendrás que adaptar el recorte a su forma. Antes de irte de alta del hospital, pide a tu enfermera que te dé el adhesivo protector antes de tirarlo, para que te sirva de plantilla, pero recuerda que podrá ir cambiando al reducirse su tamaño.

    Al recortar el disco utiliza unas tijeras de punta roma.

    Recorta de forma continuada, para evitar rebordes.

    El borde debe quedar uniforme sin salientes que puedan arañar la mucosa.

    Empieza recortando un círculo que sea ligeramente mas pequeño que el diámetro de tu estoma:

    Comprueba con el film protector aún puesto por donde debes ampliarlo.

    Ten en cuenta que puedes corregir ampliando el recorte, porque un disco en el que has recortado demasiado no podrás aprovecharlo: corres el riesgo de que tu piel se lesione.

    Recuerda: es una de las claves para un adecuado cuidado del estoma y de la piel periestomal, así como para evitar fugas.

Cambio de disco

  • Cambio de bolsa de dos piezas

    Se aconseja realizar el cambio en el baño: procura intimidad, cuentas con agua y con espejo. Se recomienda hacerlo coincidir con la ducha o higiene diaria. Elige un momento en que la salida de contenido no sea muy elevado, entre comidas.

    Puedes también aprovechar para medir el tamaño de tu estoma con la regla para tener preparado el próximo disco. Si utilizas una bolsa abierta, ya sea de una o dos piezas, puedes colocarla con su extremo ya cerrado. Estas maniobras son más fáciles de realizar antes de pegar el disco, sobre todo si no tienes aún mucho entrenamiento y destreza. Ahorran tiempo si durante el cambio estás eliminando mucha cantidad de líquido.

    Recuerda: el primer y último paso debe ser el lavado de manos.

  • Debes tener preparado todo el material antes de comenzar el cambio.

    Necesitarás una bolsa para los desperdicios, jabón neutro, una esponja suave y una toalla.

    En el hospital las enfermeras utilizan gasas y suero porque es su material de trabajo más habitual, pero recuerda que no se trata de una herida y que por tanto no es necesario ningún material especial.

  • Comenzamos despegando el disco (con la bolsa adherida) usado: siempre de arriba hacia abajo, suavemente, y traccionando con la otra mano de la piel para evitar tirones e irritación de la piel.

    Lavar abundantemente con agua. No existe problema por hacerlo en la ducha junto con el resto del cuerpo.

    Limpiar la piel circundante con la esponja, con el jabón que se utiliza para el resto del cuerpo: no hace falta que sea especial (no es necesario que sea de farmacia); pero tampoco se recomienda que sea muy cosmético (es decir, que no sea el que regalan con el perfume).

    Recuerda que la mucosa del estoma es como la mucosa del interior de la boca, es delicada y puede sangrar con facilidad. Por ello, es mejor lavar con agua por arrastre y secar a pequeños toques. Si aparece sangre en algún punto, con la esponja humedecida en agua fría, presiona durante unos minutos. Puede ser que después de terminar todo el cambio, aparezca algo de sangre roja tiñendo la bolsa, puede deberse a la manipulación. Ninguno de estos sangrados deben preocuparte si son escasos y ceden a los pocos minutos.

    Seca la piel circundante a toques, evitando frotar enérgicamente.

  • Comprueba que la piel está limpia y seca. No intentes colocar el disco sobre una piel con restos de heces, ya que impedirá que el adhesivo se fije correctamente, favoreciendo las fugas, que conducirán a lesiones o heridas en la piel.

    La humedad dificulta también la correcta adhesión.

    Aprovecha el momento del cambio para revisar el estado de tu piel, comprobando su integridad y su coloración.

  • No utilices un secador, pues podrías lesionar la piel.

    Si existe vello alrededor del estoma, no utilices una cuchilla, recórtalo con unas tijeras. Si tienes mucho vello, despega el disco en la misma dirección del pelo.

    Calienta el disco entre tus manos con ligeros masajes circulares pues el calor activa el adhesivo.

    Retira el adhesivo del disco y comienza a pegarlo a la piel desde el borde inferior hacia arriba, centrado el orificio sobre el estoma.

    Puedes mantener la mano sobre el disco una vez colocado para que el calor favorezca la acción del pegamento. Puedes permanecer unos minutos en reposo para favorecer la adhesión.

    Para desechar el material usado, mételo en una bolsa de plástico, anúdala y deséchala en el contenedor correspondiente.

    Recuerda: el disco no sólo sirve para anclar la bolsa, sino que además cuida el estado de tu piel.

  • Ten preparada una bolsa de aseo con todo el material necesario para llevarlo siempre contigo.

  • Dietética

    Dieta equilibrada para mantener el ph de la orina, que es ligeramente ácido.

    Se recomienda evitar la alcalinización de la orina, pues favorece la infección urinaria y la creación de cristales de fósforo en el estoma.

    Los alimentos que mantienen la orina ácida son la carne, el pescado, los huevos, las ciruelas… sin abusar de ningún alimento.

    Se recomienda la ingesta abundante de líquidos en torno a 2 litros diarios, si no existe contraindicación.

    Adecuados alimentos ricos en vitamina C para reducir el riesgo de infección de orina: naranja, kiwis, arándanos.

    Evitar el sobrepeso.

    Masticar bien.

  • Fármacos

    Algunos fármacos producen cambios en el color de la orina: vitamina B12 (amarillo), levodopa (oscuro), amitriptilina (azul verdoso), fenitoína (rosado).

    Los diuréticos aumentan el volumen de orina, tenlo en cuanta a la hora de vaciar más frecuentemente tu bolsa.

    Las vitaminas y algunos antibióticos como las penicilinas producen un olor desagradable de la orina.

    Las sulfamidas favorecen la formación de cristales en la orina, aumenta la ingesta de líquidos y suspende la vitamina C si la tienes prescrita.

    Puede estar recomendada la toma de vitamina C para acidificar la orina y prevenir infecciones.