En España las Unidades de Cuidados Intensivos son atendidas mayoritariamente por médicos especialistas en Medicina Intensiva. La Medicina Intensiva es una especialidad médico-quirúrgica que se cursa durante cinco años una vez terminada la carrera de Medicina y aprobado el examen MIR.
Durante esos cinco años los residentes se forman exhaustivamente en el manejo de los pacientes críticos, y adquieren los conocimientos y las habilidades necesarias para atender a los más graves entre los pacientes coronarios, postquirúrgicos, politraumatizados, con patologías infecciosas, respiratorias, neurológicas y muchas otras.
Una vez acabado su periodo de formación, además de poseer amplios conocimientos médicos sobre el paciente crítico, el intensivista es capaz de realizar técnicas complejas (intubación, colocación de catéteres venosos centrales, colocación de marcapasos, etc) y manejar aparataje sofisticado como sistemas de monitorización, respiradores, etc.
La formación del intensivista en España se ajusta a los estándares europeos, como se recoge en el Programa de Formación Basado en Competencias para Medicina Intensiva (COBATRICE).