El comienzo de un amor
Es una obra capital importancia dentro de la historia de la poesía española. El primero de una trilogía que escribió Pedro Salinas entre los años 1933 y 1938. La voz a ti debida debe mucho al poemario de Juan Ramón Jiménez, pero también a autores de tradición literaria española.
No en vano, su título hace referencia a un endecasílabo de Garcilaso de la Vega; asimismo los otros dos títulos de la trilogía tienen resonancias poéticas: Razón de amor alude a un titulo de un poema erótico medieval y Largo Lamento a un verso de la rima XV de Bécquer.
Después de un largo silencio de 67 años se pudo conocer algo que se sabía a medias, un secreto a voces doloroso para la familia de Salinas. Durante el verano de 1932 Katherine Reding, una joven estudiante norteamericana, asiste en Madrid a los cursos de perfeccionamiento en los que participa el profesor Pedro Salinas. Es el comienzo de una historia que conoció luego altibajos, una ruptura que ella impuso en 1936 y una reanudación cuando el poeta salió de España para los EEUU. Katherine será la voz, la razón de ser y el amor, el largo lamento, pero también la imagen de una sociedad menos prejuiciosa y la libertad vital del poeta moderno.
Una primera edición de bibliófilo
El ejemplar que nos ocupa fue adquirido por la Biblioteca Regional de Madrid en mayo de 2012, y se trata de una primera edición muy valorada en el mercado bibliófilo. Presenta una encuadernación holandesa con nervios, hierros dorados en el lomo y cortes de cabeza pintados.
Fue publicado por la Editorial Signo e impreso en la Imprenta Silvero Aguirre. La editorial es la misma que esos mismos años publicará a Juan Ramón Jiménez; sus propietarios -Juan Palazón y Pedro García Valdés- prestaron siempre mucha atención a los autores de la Generación del 27.
El libro formaba parte de la colección “Los Cuatro Vientos”, en la que se incluían también otros títulos de poesía y tres ejemplares de la revista del mismo nombre. Una revista abierta, promovida por el propio Salinas, cuyo interés no se centraba solamente en la poesía, sino también en el teatro, la prosa narrativa y el ensayo.
Pedro Salinas
El tímido y exigente Pedro Salinas, tal y como le definía su amigo Jorge Guillén, nació en Madrid –en la calle de Toledo- en el año 1891. El barrio de su niñez está profundamente ligado a la más temprana historia de la ciudad; la calle donde vivía, la calle de Don Pedro, forma parte del distrito conocido con el nombre de “la Morería” o Madrid árabe. Siempre se consideró Salinas madrileño, a pesar de haber vivido en muchos lugares donde alternó el estudio, la docencia y la escritura, como París, Sevilla, Murcia o Cambridge, y los lugares de su exilio: Puerto Rico y Estados Unidos, donde fallecería en 1951.
Humanista, miembro de la llamada Generación del 27, dotado de una gran sensibilidad para lo que le rodeaba, Pedro Salinas posee una personalidad compleja, que le hace abordar no solo la poesía sino también el teatro, la novela o la crítica literaria, sin olvidar el género epistolar.
Acceso a la referencia en el Catálogo de la Biblioteca Regional de Madrid
