¿Prefieres el libro o la película?
La literatura y el cine comparten una característica fundamental: ambas cuentan historias apoyándose en la narración aunque utilizando sus propios mecanismos, el material de una novela son las palabras y el de una película las imágenes. Desde el nacimiento del cine se generó un vínculo de dependencia plagado de colaboraciones y desencuentros. Para el mundo literario el cine sería un arte popular (¨el arte de los pobres¨) y para los cineastas la obra literaria sólo es materia prima a utilizar.
En la actualidad hay cierta simbiosis, no sólo entre el cine y la literatura sino incluso entre el cine y el negocio editorial (Entre el 80-85% del total de la producción cinematográfica son películas basadas en libros), pero sigue en pie la misma polémica desde que comenzó esta colaboración: ¿puede un film expresar la buena literatura? ¿Es mejor un relato escrito que su versión cinematográfica?
¿Prefieres el libro o la película?
Hasta la aparición del cine, la literatura era el único arte capaz de expresar pensamientos y evoluciones psicológicas. Cada palabra o expresión transmite una imagen cuya combinación o ¨montaje¨ conformaría el relato, y es precisamente el ¨montaje¨ lo que permite considerar al cine un arte narrativo. El lenguaje literario sigue pues un procedimiento similar al cinematográfico en la elaboración de un relato (¨contar una historia¨).
Sin embargo, el cine es reduccionista, condensa varias páginas en una sola imagen expresando muchas cosas a la vez, mientras que la literatura facilita la imaginación, permitiendo que el lector interiorice el libro aportando una visión personal. En el cine el espectador es ¨dominado¨ y guiado hacia donde el director quiere.
El cine es una industria que debe amortizar en un plazo reducido por lo que dispone de poco margen de error. Adaptar una obra maestra literaria obliga a una gran inversión pero también ofrece mayores garantías de rentabilidad.
Hay tres formas fundamentales de llevar una novela al cine:
-Traducción cinematográfica donde se busca la fidelidad, trasladando la práctica totalidad del texto. Es la empresa más difícil y el resultado suele ser decepcionante. Puede ser ideal para los relatos breves o series de televisión de larga duración.
-La adaptación cinematográfica, es una transformación del original salvando lo esencial, el realizador arregla la obra a su manera y es la más frecuente.
La inspiración, es una auténtica creación nueva. El realizador es más libre, pudiendo tomar como referente la trama o los personajes. Aquí la adaptación es activa, no se copia sin más el texto sino que se recrea el espíritu de la obra.
Una película puede plasmar una obra literaria e incluso mejorarla, sin embargo la mayor parte de adaptaciones defraudan a sus lectores. Esto puede deberse a que el cine exige una menor colaboración intelectual al espectador, lo que explicaría su enorme éxito popular, pues se dirige al gran público en contraposición al más ¨elitista¨ público literario.
En cualquier caso y por mala que sea una película, la literatura no tiene nada que perder, los libros se venden más una vez adaptados y el cine puede ser un complemento comercial perfecto.
Además, el cine también ha influido en la literatura creando estereotipos, comportamientos e incluso modalidades lingüísticas en los que a veces se apoyan los propios escritores en sus obras.
La colaboración cine-literatura es pues fructífera y siempre es aconsejable visionar la película previa lectura del libro original. Posibilidad que nos facilitan las bibliotecas públicas ofreciéndote los distintos soportes de las obras en sus fondos.
Adaptaciones de la literatura española en el cine español
Completa base de datos de la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes.
Películas que se basan en obras de la literatura española.
Un rincón para los aficionados a los libros y a las películas.
Blog juvenil de información literaria actualizada.
Artículo que agrupa y comenta 25 excepcionales adaptaciones.