La Teleconsulta dermatológica del Hospital del Henares ha atendido ya 3.952 peticiones
SE AÑADE TAMBIÉN EL USO DEL DERMATOSCOPIO
Es una consulta muy apreciada por los médicos de atención primaria, que valoran además su carácter docente. En el último año, se realizaron 397 consultas, 3.301 desde su inicio. Si añadimos las teleconsultas realizadas desde el servicio de Urgencias (novedad implantada en este hospital que supuso un importante apoyo en la Urgencia en el tramo horario de tarde-noche en que no hay dermatólogo presente) hacen un total de 3.952 consultas solicitadas y atendidas en un plazo inferior a 48 horas.
El Hospital Universitario del Henares ha acogido una sesión formativa entre dermatólogos del hospital y médicos de Atención Primaria de la zona a la que presta servicio el centro cosladeño. El objetivo es la actualización de los conocimientos de los médicos generales en la utilización de los últimos avances en dermatología, como es la Dermatoscopia.
Este curso se enmarca dentro del proyecto de implantación del dermatoscopio como herramienta habitual de ayuda diagnóstica en los centros de salud. Además, las imágenes dermatoscópicas pueden ser ya incorporadas a la aplicación de teleconsulta que el Servicio de Dermatología del Hospital Universitario ofrece desde los inicios de su actividad.
La teleconsulta dermatológica se implantó en el año 2010 y consiste en un intercambio de información segura, a través del programa informático Selene, entre el médico de atención primaria y el dermatólogo. Cuando el médico del centro de salud tiene alguna duda sobre alguna lesión dérmica de su paciente, le hace una fotografía y la envía al hospital a través de Selene. El dermatólogo le da una respuesta antes de 48 horas.
La Dirección Asistencial Sureste incorporó el año pasado la dermatoscopia a la Atención Primaria y el servicio de Dermatología del Henares, dirigido por el Dr. Domínguez Auñón, le presta apoyo mediante la teleconsulta diaria y cursos periódicos como el recientemente celebrado.
El dermatoscopio es una herramienta cada vez más utilizada que ayuda a diferenciar las lesiones melanocíticas benignas de las malignas, facilita el diagnóstico de los tumores pigmentados de la piel y mejora asimismo el diagnóstico de una serie cada vez mayor de lesiones no pigmentadas. Mejora en un 30% la precisión diagnóstica del cáncer cutáneo, particularmente el melanoma. Permite detectar más melanomas en fases más tempranas y al mismo tiempo reduce el número de nevus benignos innecesariamente extirpados al aumentar la precisión diagnóstica.