El Piloncillo en Buitrago de Lozoya
Estructuras medievales y modernas. Necrópolis de la Iglesia de San Miguel
El Piloncillo. Buitrago de Lozoya
Los trabajos arqueológicos realizados en la calle Piloncillo han proporcionado un mayor conocimiento de la evolución del entramado urbano y el sector oeste del recinto amurallado de Buitrago de Lozoya durante las épocas Medieval y Moderna.
En el Arco del Piloncillo se pudo documentar un cimiento de cal y canto con argamasa de la jamba de un postigo de entre finales del siglo XIV y mediados del XVI, que daba paso al recinto fortificado. Antes del siglo XIV no debió existir un acceso al recinto a través de la Calle Piloncillo, como demuestra la existencia del basamento de un antiguo muro defensivo, que impediría la entrada por esta zona. Otro factor a tener en cuenta es la inexistencia de pavimentación previa a esta fecha en una zona donde la roca natural presenta numerosos desniveles e irregularidades, lo que dificultaría el tránsito, así como la presencia de un área cementerial, posiblemente del siglo XI, situada intramuros y a escasa distancia del Arco del Piloncillo, que no parece haber sido amortizada al menos hasta el siglo XIV.
La tipología de las tumbas, antropomorfas y excavadas en la roca, se corresponden con las más antiguas documentadas en las excavaciones realizadas en la cercana Plaza Ángeles Paino, junto a la iglesia de Santa María, fechadas en el siglo XII. Por su situación y disposición no cabe duda de la relación de las tumbas ahora descubiertas con la desaparecida iglesia de San Miguel, una de las cuatro parroquias con las que contaba Buitrago de Lozoya en la Edad Media.
En el siglo XVII toda esta zona cementerial vinculada a iglesia de San Miguel se cubrió con un pavimento empedrado cuya excavación aportó dos monedas del reinado de Felipe IV. La primera, con valor de IV maravedís y acuñada en la ceca de Toledo, pertenece a la serie de 1621 - 1626. De la segunda, fechada en 1636, solamente es legible un resello de XII maravedís de la ceca de Sevilla sobre 4 maravedís anteriores a la reforma de 1603.
En el siglo XVII la calle Piloncillo debió tener un importante tránsito de mercancías, de ganado y de personas. Es el momento final del auge comercial de Buitrago antes del comienzo de su progresiva decadencia a partir de la centuria siguiente.
Actuación arqueológica
Qué motivó la excavación
El control arqueológico de las obras de instalación de tubería de agua potable en la calle Piloncillo (Buitrago de Lozoya) promovidas por el Canal de Isabel II Gestión.
Protección del Bien
Conjunto Histórico-Artístico. Bien de Interés Cultural. Monumento Nacional.