La Comunidad de Madrid amplía por encima de 120.000 hectáreas su Reserva de la Biosfera con la incorporación de Madarcos

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La Comunidad de Madrid ha ampliado hoy a 121.744 hectáreas su territorio declarado Reserva de la Biosfera, con la incorporación del municipio de Madarcos, después de que la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) haya aprobado la propuesta del Gobierno regional en la 34ª Sesión del Comité Internacional del Programa Hombre y Biosfera.

https://www.comunidad.madrid/sites/default/files/comite_internacional_programa_hombre_y_biosfera_unesco_5.jpeg16001197Luis del Olmo, Director General de Biodiversidad y Recursos Naturales de la Consejería de Medio Ambiente, en el foro
15 junio 2022

Se trata de 860,7 hectáreas que pasan a formar parte de la Reserva de la Biosfera Sierra del Rincón. Desde su aceptación por el organismo internacional en 2005, este enclave incluía hasta ahora 15.230, pertenecientes a las localidades de La Hiruela, Horcajuelo de la Sierra, Montejo de la Sierra, Prádena del Rincón y Puebla de la Sierra. Este espacio con baja densidad de población apenas supera los cuatro habitantes por kilómetro cuadrado y se caracteriza por su entorno eminentemente rural, montañoso y de paisajes bien conservados. 

Además, en junio del año 2019, la UNESCO aprobó la ampliación de la Reserva de la Biosfera de la Cuenca Alta del Manzanares, que pasó a denominarse de las cuencas altas de los ríos Manzanares, Lozoya y Guadarrama, incluyendo a 27 municipios madrileños y con una superficie de 105.654 hectáreas, entre las que se incluye todo el Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama como zona núcleo de máxima protección y conservación de biodiversidad.

Para la consejera de Medio Ambiente, Vivienda y Agricultura, Paloma Martín, “es un gran honor y un magnífico éxito del que nos sentimos muy orgullosos, fruto de la colaboración de las instituciones y los vecinos”. “Vamos a contribuir a proteger nuestros espacios naturales, pero también a desarrollar la actividad económica en 33 municipios madrileños”, ha apostillado.

Las reservas son zonas de ecosistemas terrestres, costeros o marinos, o una combinación de ellos, reconocidas internacionalmente por su valor. Se crean para promover y demostrar una relación equilibrada entre los seres humanos y el resto de seres vivos, a solicitud del Estado interesado.

Desarrollo sostenible e impulso de la economía local

La Comunidad de Madrid es la región de la Península Ibérica con mayor espacio protegido, el 52%, porcentaje únicamente superado en España por las Islas Canarias. En concreto, en las dos reservas que tiene –Sierra del Rincón y cuencas altas de los ríos Manzanares, Lozoya y Guadarrama– se trabaja para potenciar su desarrollo sostenible e impulsar la economía local y el turismo.

Martín ha destacado que “con esta ampliación adquirimos un compromiso aún con la conservación del patrimonio verde regional, así como el aprovechamiento de los recursos, los usos tradicionales y las costumbres de cada territorio, contribuyendo a crear empleo y mejorar la vida de las poblaciones de estas zonas”.

Variedad de fauna y flora en la Sierra del Rincón 

El enclave de la Sierra del Rincón cuenta con una gran riqueza paisajística, la representatividad de sus ecosistemas mediterráneos y su modelo de conservación de la biodiversidad y de aplicación de prácticas de desarrollo sostenible.

Tiene una gran cantidad de especies de fauna y flora, entre ellas más de 195 especies de vertebrados y 492 de invertebrados, 1.270 de flora vascular (sin incluir especies hortícolas y frutícolas cultivadas) y 690 no vascular. De ellas, un buen número están legalmente protegidas por convenios internacionales, catálogos regionales o nacionales.

Destacan asimismo la inclusión de un buen número de ejemplares en el Catálogo de Árboles Singulares y la presencia de gran variedad de plantas domésticas –tanto de especies hortícolas como de frutales–, muchas de ellas en peligro inminente de desaparición. La recuperación de huertos abandonados y la conexión del sector hostelero y de restauración con los productores está tratando de corregir esta situación, convirtiéndolo en un importante recurso gastronómico y cultural.