La rehabilitación debe actuar tanto en la causa de la discapacidad como en los efectos producidos por la enfermedad para aumentar la función perdida y la calidad de vida. El objetivo es ayudar a todos los pacientes que lo precisen a utilizar las capacidades residuales, de manera que puedan recuperar el estado funcional óptimo en relación a las posibilidades remanentes.
Ubicado en la planta baja del hospital, este servicio central está formado por un jefe de sección, cinco facultativos, una supervisora, 24 fisioterapeutas, 2 terapeutas ocupacionales, 5 auxiliares de clínica, 1 auxiliar administrativo y 2 celadores.
Cuenta con acreditación pregrado, ofreciendo anualmente prácticas tuteladas para estudiantes de Fisioterapia.