El yacimiento arqueológico de Los Berrocales
Poblamiento romano y altomedieval en el distrito de Vicálvaro
Descripción del yacimiento Los Berrocales
El yacimiento arqueológico de Los Berrocales se localiza en el distrito madrileño de Vicálvaro, sobre las amplias plataformas que definen la línea divisoria entre los ríos Manzanares y Jarama. Cerca del actual núcleo de población de Vicálvaro se han documentado varios enclaves con industrias paleolíticas (Valle Virgen de la Torre, Langostillo, El Cañaveral, cabecera del Valle Virgen de la Torre). Del Neolítico Antiguo destaca el yacimiento de Casa Montero, caracterizado por la existencia de numerosos pozos de extracción de sílex.
De época musulmana perviven los topónimos de Cerro Almodóvar y Ambroz (antiguo despoblado hoy desaparecido) que permiten aventurar que tanto Vicálvaro como sus alrededores estuvieron poblados de forma continuada a lo largo del tiempo.
La excavación arqueológica realizada en la Manzana 2 de Los Berrocales permitió documentar tres fases de ocupación.
Los restos de época romana corresponden a una villa fundada en el siglo I que estuvo ocupada hasta el siglo II. Las diferentes estancias se encuentran articuladas en torno a un patio central compartimentado a su vez en dos. En torno a la villa se ha documentado un fundus (explotación agropecuaria). En esta zona aparecieron restos de hogares y de grandes recipientes contenedores, piezas de cerámica común y pesas de telar. También una fíbula de omega y dos styli, (instrumentos que servían para escribir) de bronce, un cuchillo de hierro con enmangue de hueso, un lingote de plomo y abundantes fragmentos de molinos de granito.
A mediados del siglo II se produce el abandono de toda la zona de forma pacífica y no vuelve a ocuparse hasta finales del siglo IV - principios del siglo V. A esta época pertenecen las cabañas, silos, cubetas y los tres vertederos documentados. El material cerámico que ha permitido ajustar la cronología en este período corresponde en su mayor parte a Terra Sigillata Hispánica Tardía y Cerámicas Grises.
Durante el siglo VI se constata un aumento del número de cabañas y de las estructuras de almacenamiento, lo que marca un claro cambio en el modelo de organización del espacio, definiéndose ahora el lugar como una aldea compuesta por cabañas unifamiliares. También se identificaron algunos silos, pozos y cubetas. De esta época son también varias inhumaciones.
Este tipo de asentamientos se caracterizaban por articularse en torno a una necrópolis que ha sido documentada fuera de la Manzana 2, por tanto, estos casos de enterramientos aislados en el interior del aldea podrían indicar la ausencia de un patrón establecido para el tratamiento y ubicación de los difuntos o bien tratarse de individuos excluidos socialmente de la comunidad.
Se hallaron además los restos de tres individuos en el fondo de un silo, uno en posición primaria y los otros dos en posición secundaria siendo probable que, como en los casos anteriores, se trate de individuos excluidos socialmente de la estructura de la aldea. En cuanto a los materiales documentados, principalmente se hallaron cerámicas de tipologías de torno rápido y de torno lento, así como algunos objetos de metal (dos hebillas de bronce, un auriscalpium -instrumento médico para los oídos- y un anillo de bronce).
En torno a la primera mitad del siglo VIII el asentamiento fue definitivamente abandonado.
Actuación arqueológica
La excavación arqueológica del yacimiento se realizó durante el desarrollo del Proyecto de Actuación Urbanística 02.04 del ámbito Los Berrocales, concretamente del sector Manzana 2.