Arquitectos de Madrid: Juan Gómez de Mora
Arquitecto polifacético, y figura fundamental en la reordenación urbana de Madrid durante el siglo XVII adoptó en sus obras, el estilo herreriano, sobrio y austero, que dominó la arquitectura española durante casi un siglo, y se extendió a América, convirtiéndose en una de la señas de identidad del reinado de Felipe II.
Breve reseña biográfica
Juan Gómez de Mora (Cuenca, 1586 - Madrid, 1648)
Hijo de Juan Gómez, pintor de cámara de Felipe II, nace en Cuenca en 1586 aunque pronto se traslada con su familia primero a Madrid y luego a El Escorial.
Al morir su padre se hace cargo de él y de su formación su tío Francisco de Mora, Trazador y Maestro Mayor de la Villa y de las Obras Reales, cargos que tras su muerte heredará Juan Gómez de Mora.
Juan Gómez de Mora destacó como autor de numerosos diseños que abarcan una gran variedad de tipologías arquitectónicas, tanto civiles como religiosas, así como elementos de arquitectura efímera.
Obra
Algunas de sus obras aún permanecen pero otras muchas se han perdido como, por ejemplo, la Fuente de la Abundancia, que estuvo en la plaza de la Cebada hasta 1840, y de la que únicamente se conservan los bocetos del autor, así como pinturas y estampas de Louis Meunier.
Desarrolla la mayor parte de su obra en la capital, con hitos como el proyecto urbanístico más importante de la época: la Plaza Mayor. En ella demostró su destreza técnica: el Arco de Cuchilleros y la escalerilla para salvar el desnivel fueron idea suya, aunque los actuales son de la reforma de Villanueva tras el incendio de 1790.
Como arquitecto real trabaja en el Alcázar, donde coincide muchos años con Velázquez, en el Palacio de la Zarzuela, la Torre de la Parada de El Pardo, o el Panteón de Reyes de El Escorial, cripta bajo la basílica del monasterio donde descansan todos los monarcas de la dinastía Austria y casi todos los borbones excepto Felipe V, que escogió La Granja de San Ildefonso, y Fernando VI, que descansa junto a su esposa Bárbara de Braganza en el convento que ella fundó: las Salesas Reales. Este fue decorado por el italiano Crescenzi.
La influencia del estilo herreriano con plantas rectangulares, simetría y chapiteles, es patente por ejemplo en la antigua Cárcel de Corte, ahora Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación que, al igual que la Plaza Mayor, también se quemó y también fue Villanueva el encargado de reconstruirla.
Coincidiendo con las obras de la cárcel, comienza la Casa de la Villa, espacio que funcionaría como presidio y como Ayuntamiento; esta última función la ha mantenido hasta su traslado al Palacio de Telecomunicaciones.
Otra de sus grandes obras fue la llamada Cerca de Felipe IV, ampliación de la muralla para un Madrid que ya alcanzaba los 90.000 habitantes; en ella trabajaron presidiarios y se financió con la sisa, un impuesto al vino.
También dentro de la Comunidad proyectó varias obras en Alcalá de Henares. El conocido como Colegio de Málaga (actual facultad de Filosofía y Letras) y el convento de San Bernardo, levantado por orden del arzobispo de Toledo y mecenas, Bernardo de Sandoval y Rojas. Para la iglesia Gómez de Mora construye una planta oval inserta en un rectángulo cubierta por una cúpula ovalada más grande en la época. En su interior hay que destacar el templete de la iglesia y piezas como el arca de Carlos V, realizada en plata y ébano, por encargo de su hijo Felipe II. Monumento artístico desde 1924, sufrió importantes daños durante la Guerra Civil, por lo que se realizan continuos trabajos de rehabilitación y restauración. En 2016 formó parte del programa “Abierto por obras” puesto en marcha por la Dirección General de Patrimonio Cultural de la Comunidad de Madrid.
Aunque disfrutaba de posición y reconocimiento, su enfrentamiento con otros miembros del gremio y con el conde duque de Olivares le llevaron a ser apartado de la corte y a la pérdida de sus cargos, que no recupera hasta pocos años antes de su muerte.