
Picasso y Arias
Biografías y cronologías.
La amistad entre Pablo Picasso y Eugenio Arias, surgida en Vallauris, Francia, articula el sentido de la colección del Museo Picasso - Colección Eugenio Arias.
Este museo, dedicado al arte y la amistad, resulta un claro ejemplo de las consonancias y las relaciones que se establecieron entre ellos, reflejando las aficiones, las pasiones y las preocupaciones compartidas: el exilio, la afición a los toros, la militancia izquierdista, la nostalgia por la cultura española y el respeto y afecto a la profesión de barbero.
Cronologías
LOS LUGARES DE PICASSO
Chateau de Vauvenargues:
Picasso adquiere este castillo, de austeridad casi monacal y construido en el siglo XIV, en 1958 en busca de un lugar mas tranquilo para trabajar.
En los jardines de esta residencia, situada junto a la montaña Sainte-Victoire, cerca de Aix-en-Provenze y los paisajes cezannianos, los restos de Picasso, fallecido en Mougins, encuentran descanso en 1973.
Notre-Dame de Vie, Mougins:
En esta residencia situada cerca de Cannes donde se instala con Jacqueline tras su matrimonio en 1961, establece su último taller. Fallece allí el 8 de abril de 1973.
Taller de alfarería "Madoura":
Tras su traslado a Vallauris, Picasso redescubre la cerámica, tras realizar los primeros ensayos con Paco Durrio, el ceramista vasco amigo de Gauguin, quien le había introducido por primera vez en las técnicas de la cerámica en los primeros años del siglo XX en su estudio de París.
En el taller Madoura, a cuyos propietarios, Georges y Suzanne Ramié, había conocido en la Fete des Potiers, Picasso había empezado a hacer algunos ensayos de cerámica en agosto de 1946. Un año después inicia una intensa actividad como ceramista, ejecutando dos mil piezas con innovaciones en las formas, las técnicas y la utilización de colores.
Vallauris:
Antiguo centro alfarero en la costa mediterránea francesa, donde en verano de 1948 Picasso y Françoise Gilot fijan su residencia definitiva en la Villa La Galloise hasta 1953. Desde allí realizaban esporádicas visitas a París, donde el artista aún conservaba su estudio de la rue Grands-Augustins. En esta localidad, donde también se encuentra la Barbería de Eugenio Arias y el taller de alfarería Madoura, Picasso experimentó nuevas técnicas artísticas, con el grabado y la cerámica, adquiriendo los talleres de Fournas, una antigua fábrica de perfumes para instalar en ella talleres de cerámica, pintura y escultura.
En esta ciudad se casó en 1961 con Jacqueline Roque y fueron celebrados en 1961 y 1971 sus 80 y 90 aniversarios, recibiendo el homenaje de artistas venidos del mundo entero.
De la estrecha relación del artista con Vallauris, se conserva en la plaza del mercado una capilla secularizada del siglo XIV que en 1954 fue decorada por Picasso con paneles sobre la Guerra y la Paz, transformándola en Templo a la Paz, como respuesta a la guerra de Corea.
Villa La Californie, Cannes:
Nueva residencia de Picasso en el Midi, adquirida en junio de 1955, donde reside con Jacqueline hasta 1961.
Se trata de una gran construcción de la Belle Époque, situada en las alturas de Cannes, con vistas sobre Golfe-Juan y Antibes, y un gran jardín de palmeras y eucaliptos en el que encontrarán sitio las esculturas.
Aquí pinta sus célebres "Paisajes de interior" de 1955. David Douglas Duncan, quien realizó un libro sobre la vida de Picasso en su casa-taller, que también fue fotografiada por Edward Quinn y André Villers, evoca el lugar como "la casa más feliz del mundo" ("The private world of Picasso", 1958).
Nombres propios
Palabras clave
Amistad
Picasso acude desde 1948 a la barbería de Eugenio Arias en Vallauris, donde disfrutaba de la conversación con el barbero, un exiliado comunista como él. En palabras de Eugenio Arias, Picasso siempre estaba atento a los problemas de sus compatriotas y procuraba entablar conocimiento con ellos. "Era como un balón de oxígeno para nosotros".
Picasso fiel a las amistades antiguas, hizo partícipe a Arias de su círculo artístico e íntimo de amistades, de los cuales también se conservan recuerdos en el Museo: Jacqueline Rocque, Françoise Gilot, Jean Cocteau, David Douglas Duncan, Edouard Pignon, Hélène Parmelin o André Villers.
Arias, exiliado como el propio Picasso, fue su peluquero y amigo durante 26 años. Apenas conversaban de política a pesar de sus afinidades ideológicas. Ambos compartían la vida cotidiana: jugaban a las cartas, realizaban rondas a los bares, asistían a las corridas de toros, conversaban sobre España y Arias le recitaba poesía española. Pero la relación entre ambos era más amplia y compleja. Arias se encargaba de las relaciones humanas del artista con el mundo exterior durante los años que vivió en Vallauris.
Desde su peluquería, Arias recibía a las personas que llegaban a esta localidad con el propósito de visitar al pintor. Ahuyentaba a los curiosos y procuraba conceder entrevistas con el pintor a artistas, toreros, cantaores o españoles que trabajaban en Francia y deseaban conocer a su genial compatriota.
Exilio
Picasso, artista comprometido en la lucha contra el franquismo, realizó, durante la Guerra, las siguientes declaraciones explícitas de su antifascismo:
La Guerra de España es la batalla de la reacción contra el pueblo, contra la libertad. Toda mi vida de artista no ha sido más que una lucha continua contra la reacción y la muerte del arte. En la obra en la que actualmente trabajo, que llamaré Guernica, expreso con claridad mi horror por la casta militar que hace ensombrecer a España en un océano de dolor y muerte.
Posteriormente, en 1944, se adhirió al Partido Comunista, adhesión que consideró una consecuencia de su existencia y de su concepción del arte.
El dibujo de la paloma dibujada por Picasso y utilizada por Louis Aragon como imagen para el cartel del Congreso fundacional del Movimiento por la Paz de 1949 adquiere posteriormente un claro signo antifranquista de compromiso político con la defensa de los derechos humanos y la reivindicación de libertad para los presos políticos españoles.
Casi el noventa por ciento de la vida de Picasso transcurrió fuera de España. Tras la Guerra Civil, su permanencia fuera de su país natal, hasta entonces de forma voluntaria, se transformó en exilio político. En esta condición falleció, apenas dos años antes del inicio de la transición democrática española, por la que jamás dejó de luchar.
Afición a los toros
La pasión por las plazas, los toreros y los toros fue una constante en la vida de Picasso y un tema recurrente en su obra a lo largo de toda su carrera. Para el artista, la corrida escenifica el drama de la vida y de la muerte y el rito ancestral que enfrenta al hombre y a la muerte. Después, durante su exilio, los toros también encarnan lo más profundo de su arraigada filiación hispánica.
Picasso y Arias compartían esta gran afición por la fiesta taurina, a la que acuden juntos con cierta frecuencia en diferentes ruedos del sur de Francia (Arlés, Céret, Collioure, Fréjus y Nimes) y mantuvieron amistad con toreros y de forma especial con Luis Miguel Dominguín.
A partir de 1951, Picasso contribuye incluso al establecimiento de una temporada taurina en Vallauris, organizadas por el torero madrileño Paco Muñoz, para la que realizará el diseño de su cartelería.