Un vestido de boda distinto del encargado

AddToAny

El consumidor: 
Encarga un vestido de boda a medida por catálogo en un establecimiento. Le toman medidas y deja una señal en cuenta de 376 euros. Cuando se prueba el vestido, dos meses más tarde, no era el encargado por catálogo, estaba sucio y le quedaba muy grande. Reclama la devolución de los 376 euros de la señal más una indemnización de 500 euros por los daños y perjuicios de quedar sólo un mes y medio para buscar un vestido para su boda. 
La empresa: 
Alega que las medidas del vestido son las que se pidieron al fabricante y que, dada la naturaleza del producto, no se admiten cambios según el contrato. 
El colegio arbitral: 
Estima la reclamación de la persona consumidora ya que, aunque se comprueba que el vestido era nuevo, era varias tallas más grande de lo que se precisaba, incumpliendo las expectativas del cliente, por lo que se acuerda el reembolso del mismo.