Extravío de paquete
El consumidor:
Envía un paquete a través de una empresa de mensajería, con ropa de varias marcas, un sobre con 200 euros y paños de cocina. El paquete se extravía y no llega a su destino. El consumidor presenta reclamaciones a la empresa, que finalmente le notifica por correo electrónico que el paquete se ha extraviado y que le indemnizan con 28,75 euros. El consumidor rechaza el ofrecimiento de la empresa y reclama la localización del paquete o la indemnización con el valor de su contenido.
La empresa:
Asegura que, tras realizar investigaciones para localizar el envío, estas han resultado infructuosas. Ante esta situación, defiende que las condiciones generales del envío, que el consumidor firmó, limitan la indemnización.
Además, aclara que el consumidor no aseguró el envío ni realizó ninguna declaración del valor de su contenido, a pesar de que esa opción estaba disponible.
El colegio arbitral:
Concluye que el consumidor no ha acreditado por ningún medio probatorio el valor del contenido del paquete enviado ni tampoco realizó reseña de valor declarado en el envío, a pesar de que contaba con esa opción. También considera que el consumidor no puede alegar desconocer las condiciones generales del envío, ya que las firmó. Por ello, limita la indemnización a lo establecido.
Le recordamos la importancia de leer detenidamente las condiciones generales de los contratos antes de firmarlos.