Muebles. Preste atención a la etiqueta antes de comprar

El etiquetado de los muebles se regula por el Reglamento de Etiquetado de productos industriales destinados a la venta directa a las personas consumidoras.

El etiquetado de los muebles deberá contener de forma obligatoria información sobre los siguientes aspectos:

• Nombre del producto. Deberá aportar información sobre la denominación usual o comercial que permita identificar el tipo de mueble, distinguiéndolo de aquellos con los que se pueda confundir.

• Composición. Se deben indicar los materiales empleados en la fabricación del mueble, así como sus características en cuanto a calidad o seguridad. Esta información debe hacer referencia tanto a la estructura (hierro, madera), como a los revestimientos (textil, plástico), acabados y rellenos, a fin de que el consumidor pueda conocer con detalle los materiales que forman parte del mueble. 

  Según el tipo de material utilizado, se tendrá que añadir información adicional. Por ejemplo, los fabricantes de muebles de madera deben informar sobre la cantidad de emisión de aldehído fórmico que libera el mueble.

• Características esenciales. Los muebles deben proporcionar en su etiquetado información acerca de las instrucciones (ya sea de montaje, uso o mantenimiento), advertencias, consejos, o recomendaciones (de cuidados, limpieza), así como la información acerca de su manejo, o condiciones de seguridad.

• Identificación. Debe aparecer el nombre o razón social o la denominación de la entidad fabricante o de la vendedora y, en todo caso, su domicilio.

• Origen. También deben proporcionar información del lugar de procedencia u origen del mueble.

• Precio. Deben informarle sobre el precio final con los impuestos incluidos. 

Aunque no debe constar en la etiqueta, el vendedor deberá también informarle sobre el coste adicional por servicio de transporte, instalación o montaje, en su caso.

Con carácter general, además se debe tener en cuenta que la información en las etiquetas deberá estar al menos en castellano. Los datos obligatorios del etiquetado deben estar visibles y se tienen que leer con facilidad. 

Las etiquetas podrán estar sobre el propio producto o sobre su embalaje y no pueden inducir a confusión sobre su composición u origen.

Se recomienda guardar copia de las recomendaciones de uso, mantenimiento, también del tique de compra o factura. Recuerde que le pedirán el tique o factura en el caso de que presente problemas en el periodo de garantía.

Los muebles infantiles, especialmente los diseñados para niños menores de cinco años, deberán destacar en su etiqueta:

• Que se trata de muebles para niños menores de cinco años
• Número de registro industrial del fabricante español o número de identificación fiscal del importador, cuando se trate de muebles importados.
• Nombre o razón social o denominación y domicilio del fabricante, importador o del vendedor.

Hay ocasiones en las que el mobiliario incluye material textil, como puede suceder con los sofás, taburetes o con algunos artículos relacionados, tales como alfombras o tapetes.

En estos casos, las etiquetas deben ceñirse también a lo establecido para los productos textiles, definiendo la composición de las fibras textiles que forman parte del producto.

En el caso de que tenga algún problema en la compra de sus muebles o que el etiquetado no se corresponda con lo que exige la normativa, puede presentar una reclamación ante la Dirección General de Comercio, Consumo y Servicios, o ante la Oficina Municipal de Información al Consumidor más próxima a su domicilio,  o a través de internet.

Fecha de publicación: 25 de abril de 2024